La medicina estética es una de las ramas de la medicina que han cobrado más protagonismo en los últimos 10 años. Y es qué no se trata de una simple tendencia de moda, esta ciencia ha demostrado a lo largo de los años que puede ofrecer resultados verídicos a sus pacientes.
¿Dar marcha atrás al envejecimiento? ¿Combatir la alopecia? ¿Resaltar tus mejores atributos faciales? Estos son solo algunos de los aspectos a los que la medicina estética da respuestas bastante satisfactorias, aquí te contamos cómo es esto posible y cuáles son sus principales beneficios.
¿Qué es la Medicina Estética?
Diciéndolo de una forma sencilla, se trata de una rama de la medicina que se encarga de mantener y restaurar la estética de los individuos. De esta forma busca contribuir con su salud y proporcionarles una mejor calidad de vida.
La finalidad de la medicina estética es fomentar la salud desde un punto de vista biopsicosocial manteniendo la armonía de la persona de su imagen externa.
Es importante recordar, que, si bien en esta rama se abarcan aspectos estéticos, sigue siendo una disciplina de la medicina, y, por tanto, su principal objetivo es la salud. Así mismo, al tratarse de una ciencia médica, sus procedimientos están basados en conocimientos que provienen de estudios fidedignos, con método científico y experimentación segura.
Otro aspecto clave para definir a la medicina estética es que aprendamos a diferenciarla de otras ramas, particularmente de la cirugía plástica. En este sentido, la principal distinción es el grado de qué tan invasivas son cada una de estas.
En la cirugía plástica se corrigen aspectos estéticos y funcionales mediante intervenciones quirúrgicas de medianas y altas complejidades. Por ejemplo, liposucciones, lipoesculturas, implantes, reconstrucciones, entre otros.
Por otra parte, la medicina estética es no invasiva, utiliza procedimientos menores que pueden llevarse a cabo en el mismo consultorio o en cirugías ambulatorias con anestesia local.
Beneficios de la Medicina Estética
Algunas de las ventajas más resaltantes de estos tratamientos son:
1. Procedimientos poco invasivos
Las intervenciones realizadas suelen ser bastante puntuales, con métodos rápidos y eficaces que no requieren de cirugías complejas. Muchas de estas se aplican en el propio consultorio del médico como la aplicación de botox o ácido hialurónico, mientras que para otros como la rinomodelación puede ser necesario la utilización de espacios más acordes e iluminados y aplicar anestesia local sobre la zona.
2. Rápida recuperación
Al tratarse de procedimientos poco invasivos su recuperación es mucho más simple y rápida. No requieren de complicados procesos de cicatrización y sus resultados se pueden apreciar prácticamente desde el inicio.
2. Resultados a corto plazo
Los resultados de la medicina estética se pueden apreciar en el corto plazo, desde ese mismo día hasta un par de días después como en el caso del aumento de labios, mesoterapia facial, el hifu, los hilos tensores, entre otros.
3. Pequeñas modificaciones con grandes resultados
Las técnicas de la medicina estética si bien implican realizar pequeñas alteraciones, no quiere decir que los resultados no sean significativos. Recuperar la tonicidad de la piel, deshacerse de las ojeras, las líneas de expresión, manchas e incluso recuperar la densidad del cuero cabelludo, son cosas que harán que los pacientes se sientan mucho más a gusto con su aspecto externo.
4. Mejora tu salud mental
No se trata de una mera cuestión de modas. Estar a gusto con la apariencia externa es un punto muy importante para la salud mental del individuo y no es solo cuestión de autoestima.
Eliminar una cicatriz por ejemplo de un accidente de coche, puede ayudar no solo a mejorar la apariencia sino también a dejar atrás ese suceso traumático en nuestras vidas.
¿Qué tener en cuenta a la hora de hacerse un tratamiento de Medicina Estética?
La medicina estética como ya hemos comentado es una rama de la medicina, no se trata de un mero tratamiento de belleza, sino que requiere un enfoque desde la salud. Por ello, si deseas someterte a algún tratamiento de esta índole es necesario que tomes en cuenta los siguientes aspectos:
1. Un equipo profesional
La medicina estética debe, como su nombre lo indica, ser practicada por médicos y además especialistas en el área. Para esto es necesario culminar la carrera de medicina de unos 6 a 7 años y posteriormente hacer la especialidad correspondiente.
Incluso dermatólogos y cirujanos plásticos requieren, además de la formación que ya tienen, hacer estudios en esta rama para manejar adecuadamente las técnicas o procedimientos especiales de esta ciencia.
2. El conocimiento es tu mejor aliado
Si bien tu médico te ofrecerá la información necesaria antes de que decidas optar por alguno de los procedimiento de la medicina estética, también es bueno que cuentes con algo más de información antes o después de la consulta.
Siempre será conveniente que te documentes sobre tus opciones y sobre el proceso por el cual vas a pasar, así también podrás plantear las dudas que tengas a tu profesional y obtener una asesoría mucho más completa.
3. Ten en cuenta los tiempos de recuperación
Muchas veces las personas acuden a los centros de medicina estética con la creencia de que obtendrán un resultado inmediato. Y esto puede ser así para algunos tratamientos, pero otros requerirán un poco más de tiempo.
Por ejemplo, si quieres obtener los beneficios de un peeling químico, pero tienes un evento importante este fin de semana entonces será mejor que lo pospongas, ya que es necesario que le des a tu piel el tiempo y reposo necesario para renovarse.
4. Cuidados posteriores
Si bien la medicina estética es poco invasiva, esto no quiere decir que no conlleve un pequeño tiempo en el cual debas guardar cierto reposo y cuidado. En este tiempo debes cuidarte del sol y utilizar solo los productos que sean aprobados por tu médico.
5. Mejora tus hábitos de alimentación
Sabemos que escuchas esto todos los días, pero es que precisamente se trata de un punto clave, para tu salud en general y particularmente para la salud de tu piel. Mantener una dieta balanceada y una buena hidratación son vitales para mantener la tonicidad de tu piel, y durante la etapa post intervención ayudarán a tu cuerpo a recuperarse más rápido.
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