El tratamiento con ácido poliláctico revierte el envejecimiento facial de forma progresiva, sin recurrir a procedimientos agresivos o intervenciones quirúrgicas. Se inyecta en la dermis, mediante pequeñas infiltraciones que ocasionan mínimas molestias. Posteriormente, el producto induce la formación de nuevo colágeno de manera natural y progresiva, de forma que el paciente percibe un mejor aspecto de forma gradual.Se requieren varias sesiones (3 como promedio) para obtener el resultado estético deseado. Una vez finalizado el tratamiento, los resultados son muy duraderos, con una durabilidad de hasta 2 años. Es posible realizar sesiones de mantenimiento tras dicho periodo.Zonas de aplicación: temporales, ojeras, pómulos, paranasales, malares, nasolabiales, comisuras y mentón.